MISIÓN de la escuela dominical

Nuestra misión está centrada en el desarrollo de cada alumno para equiparlos con las herramientas necesarias para que puedan realizar las labores por la cual el Señor nos llamó. 

ENSEÑANZA:

Al enseñar tenemos como meta la excelencia y aplicación de la palabra de Dios.

eQUIPAR:

Proveer las herramientas necesarias para vivir piadosamente.

ASIMILACIÓN:

Ser sensibles a todos los alumnos convocando la unida.

mINISTERIO:

Capacitar a los alumnos para poner la fe en acción.

RECURSOS DE AYUDA ESCUELA DOMINICAL

UNIDAD 2

Unidad 2

Unidad 2: El fruto del Espíritu

Amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza, ¿se siente intimidado por tales rasgos? ¿Siente que producir este carácter es de alguna manera su trabajo como seguidor de Jesús? ¡Qué lista de cosas sería esa!

Sin embargo, como explicó Dietrich Bonhoeffer en El costo del discipulado:

El fruto es siempre lo milagroso, lo creado; nunca es el resultado de la voluntad, sino siempre de un crecimiento. El fruto del Espíritu es un don de Dios, y sólo él puede producirlo. Quienes lo llevan saben tan poco sobre este como el árbol sabe de su fruto. Sólo conocen el poder de aquel de quien depende su vida.1

Durante las próximas semanas, sus alumnos estudiarán acerca del carácter de Cristo, y cómo el Espíritu lo cultiva en la vida de los creyentes mientras andan con Él.

La lección 8 comienza con una definición bíblica de espiritualidad. La clave para producir el fruto del Espíritu es cultivar una vida en el Espíritu, quien nos guía hacia Cristo y nos aleja de nuestra naturaleza pecaminosa. Las lecciones 9–11 desglosan estas nueve características de Cristo una por una, comenzando con el amor, a través del cual se manifiestan los demás frutos:

Gozo es Amor jubiloso y Paz es amor en reposo; Paciencia es amor que persevera en las pruebas; Benignidad es amor que cede a la piedad; Bondad es amor en acciones que brotan del Cristo interior; Fe son los ojos del amor a través de los cuales Cristo ve; Mansedumbre es amor que no contiende, sino que se rinde ante la Cruz; Dominio propio es amor en arneses y bajo el control de Cristo; Porque Cristo es amor en persona, y Amor, es Cristo en el alma.2

Después de que la lección 12 explora cómo la experiencia pentecostal llegó más allá de Jerusalén para tocar a los samaritanos, gentiles y nuevos creyentes en Éfeso, la lección 13 concluye nuestro estudio del fruto del Espíritu justo donde comenzamos: con el amor. Pablo llama a esto «un camino aun más excelente» (1 Corintios 12:31), y nadie puede producir el fruto del Espíritu u operar en los dones del Espíritu sin él.

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1. Dietrich Bonhoeffer, The Cost of Discipleship [El costo del discipulado], Car. Editorial Kaiser, Munich, trad., Primera edición de Touchstone 2018 (Nueva York: Touchstone, 1959 SCM Press, Ltd.), 285.

2. Dr. Kenneth Moynagh (1913–1972), «The Fruit of the Spirit Is Love» [el fruto del Espíritu es el amor], consultado el 10 de noviembre de 2022, stornowayfreechurch.com/news/ poem-on-love-by-dr-kenneth-moynagh-1913-1972.


FOLLETOS DE AYUDAS Y RECURSOS

UNIDAD 2: El fruto del Espíritu

Hojas de recursos y Ayuda

Lección 8: La vida en el Espíritu (21 de Abril)

Lección 9: El Espíritu produce amor, gozo, paz (28 de Abril)

Lección 10: El Espíritu produce paciencia, bondad, benignidad (5 de Mayo)

Lección 11: El Espíritu produce fidelidad, mansedumbre, dominio propio (12 de Mayo)

Lección 12: La experiencia pentecostal continúa (19 de Mayo)

Lección 13: El amor es un camino aún más excelente (26 de Mayo)

Sólo para uso de salon de clase. Dios le Bendiga.

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